Conectándose á lá Verdáderá Adorácion
Una vez conectado no te puedes desconectar. Definamos: Conectar - Unir, enlazar, establecer relación o contacto, poner en comunicación. Ejemplo: Cuando conectas un enser eléctrico a una corriente de electricidad siempre hay electricidad corriendo, es hasta cuando lo enciendes que comienza a ejercer la función para cual fue hecho. Quiero comprar y hacer una analogía del ejemplo que acabo de decir Nosotros como hijos de Dios una vez decidimos entregar nuestras vidas a Cristo, y estar y ser partícipe del Reino de Dios, desde ese entonces nuestro espíritu está conectado al Espíritu Dios una vez y para siempre. Por lo tanto, no te puedes desconectar de su Espíritu. Como adoradores, la cual es nuestra función en el cuerpo, ya sea como danzores, abanderados, mimos, cantores, tañedores, etc.; nuestro deber es siempre estar encendidos para poder ejecutar nuestra función. (Así como en 1 Corintios 12 dice que la iglesia es un cuerpo que tiene muchos miembros, así cada uno de nosotros hacemos una función diferente en el cuerpo de Cristo. Aunque todos somos adoradores, hay diferentes funciones, como profetas, pastores, maestros, evangelistas, servidores, etc.) Ya mismo explicaremos el cómo estar “encendidos” en todo tiempo para ejecutar siempre nuestra función efectivamente. Hablemos un poco ahora de lo que es verdad o verdadera. Definición: Verdadero(a) - Que contiene o es verdad. Real, auténtico, sincero, veraz. Comencemos con un versículo de la palabra que todo adorador ha escuchado. Juan 4:23 (En espíritu y en verdad) “Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren.” Juan 4:23 NVI

Este versículo da a entender que así como hay adoración verdadera y hay adoración falsa. La adoración falsa se hace en ignorancia. Cuando la persona no entiende, comprende ni aplica lo que dice la bíblica (nuestro manual) acerca de la adoración no puede dar una adoración verdadera. Veamos la conversación que tuvo Jesús con la Samaritana en ese momento. v. 19 – “Señor, me doy cuenta de que tú eres profeta. v.20 – “Nuestros antepasados adoraron en este momento, pero ustedes los judíos dicen que el lugar donde debemos adorar está en Jerusalén. v.21 – “Créeme, mujer que se acerca la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén adorarán ustedes al Padre. v.22 – “Ahora ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación proviene de los judíos. Aquí Jesús le dice a la mujer samaritana que adoraban en ignorancia, por lo tanto su adoración era falsa porque no conocían. En el v.10, Jesús le dice: “Si supieras lo que Dios puede dar, y conocieras al que te está pidiendo agua – contesto Jesús- , tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua que da vida. Jesús sabía que la mujer samaritana no sabía quién era él, por lo tanto no podía adorar en verdad. Pero cuando leemos el versículo 23… v.23 - “Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren.” Juan 4:23 NVI Cuando él dice: “Ha llegado ya”, se refería a él. La salvación había llegado, la redención había llegado a la tierra, había llegado el conocimiento, no solo a la vida de la samaritana, sino a nuestras vidas.

v.24 – “Dios es espíritu y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.

Por eso te dije al principio que una vez le entregaste tu vida a Cristo, el Espíritu de Dios y el tuyo están conectados, sincronizados y ya no te puedes desconectar de la mejor fuente que es Cristo. ¿Cómo podemos adorar verdaderamente? La verdadera adoración tiene que ver con el conocimiento. El conocimiento y la verdad te hacen libre. Nosotros al ser espíritus, el Espíritu Santo es quien nos enseña a adorar verdaderamente. Hebreos 8:10-11. (Nuevo Pacto) Por lo tanto, adoramos de acuerdo a la revelación que tenemos de Cristo. Hay muchas personas que piensan que están adorando a Dios y en realidad solo están creando un sentido eufórico en sí mismo. Cuando cantamos bien, tocamos bien los instrumentos, danzamos bien, cuando entramos a la zona de confort y dominamos lo que hacemos. Eso es una zona de peligro, ya que ahí es donde comienza la independencia del Espíritu de Dios y apagas tu instrumento o función. Cuando ocurre eso tu humanidad es la que comienza a fluir en ti y no tu espíritu. Fíjate que no dije que te desconectabas, que apagas tu función. El conocimiento es lo que te va a ayudar a reconocer cuando estas fluyendo en tu humanidad y no en el espíritu. Pero debemos tener conocimiento de cómo hacerlo bien. La palabra dice en Salmo 33:3 “Cántádle cántico nuevo; Hacedlo bien, táñendo con júbilo”. Esto no solámente habla de entonar bien al cantar o tocar un instrumento bien. Esto habla de adorar a Dios de forma correcta. Cuando tenemos el conocimiento de lo que es adoración y la manera correcta de hacerlo, no tendremos problema a la hora de darle lo mejor a Dios. Nadie puede adorar a un nivel mayor que su propia revelación, por lo tanto, tu nivel de revelación determina la calidad de tu adoración. Conocimiento: Es un conjunto de información almacenada mediante la experiencia o el aprendizaje (a posteriori), o a través de la introspección (a prior.) El conocimiento tiene su origen en la percepción sensorial, después llega al entendimiento y concluye finalmente con la razón. Se dice que el conocimiento es una relación entre un sujeto y un objeto. No es lo mismo conocimiento que información. Podemos tener información de una persona, por ejemplo, la persona tiene cabello castaño, ojos marrones, vive en Madagascar, tiene 20 hijos, pero para conocer a esa persona tienes que tener una relación con ella. Al conocer a Dios, conoces como le gusta que le adoren, esto es un proceso primeramente personal. Cuando cada uno de los integrantes de un grupo de adoración

lleva su medida de revelación a cada ensayo o reunión de adoración, hacen una explosión de adoración correcta a Dios. El conocimiento te traerá revelación. Mientras más intimes con Dios más conocimiento y revelación tendrás. Hace unas semanas en uno de nuestros ensayos, le al equipo de adoración de cantores y tañedores de la casa, que quería desarrollar lo que el pastor y yo llamamos, Cultura de Adoración. Cultura – resultado o efecto de cultivar los conocimientos humanos. Una persona culta es aquella que se educa. Y les hice una analogía comparando una vida estudiantil en el área profesional y nosotros como adoradores. Les decía que en la universidad hay clases generales, de concentración, practica y educación continua. (Explicar la analogía) Cuando somos adoradores con una cultura de Adoración desarrollada, y comenzamos a vivir en esa cultura. Nunca te apagaras, no importando lo que pueda suceder en tu vida o a tu alrededor, estarás seguro de lo que eres y adónde vas. Cuando vives en una cultura de adoración comienzas a ser perfecto. Si, dije perfecto, “pero Yali no hay nadie perfecto” La palabra perfecto en griego se dice Téleios – completo, maduro, el que ha alcanzado la meta. Por lo tanto, me refiero a que seas maduro. 1Corintios 2:6 dice: “En cambio, hablamos con sabiduría entre los que han alcanzado madurez, pero no con la sabiduría de este mundo no con la de sus gobernantes, los cuales terminarán en nada.” NVI Puedes leer hasta el versículo 13. Cuando estas en la cultura de adoración, te conviertes en una persona sabia, que entiende quien es y lo que carga y podrás decir como dijo Pedro al cojo de la Hermosa “Y Pedro dijo: Ni tengo plata ni oro; mas lo que tengo te doy: en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. “ Hechos 3:6 Para concluir… Recuerda siempre que una vez conectado al espíritu de Dios, jamás te podrás desconectar, pero si mantente “encendido” en tu función con conocimiento, revelación y sabiduría.

Ahora quiero que cierres tus ojos y comiences a evaluar tu estatus ahora mismo. Estas “ON” o “OFF” en tu vida de adoración, estas siendo independiente del Espíritu o estas dependiendo de él, y puedes reconocer que él es todo y para él es todo. Esta tarde es un buen momento para que le digas al Espíritu de Dios…